Archivo de la categoría: tiempo
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Volviendo al día a día. Volviendo a llevar la agenda en la mano y preparándome para cerrar las fechas que me quedan libres hasta diciembre.
Hoy es la vuelta al cole… y hoy ha sido “jornada extensiva”…
Es grande que te guste el trabajo y disfrutes con él 🙂
Ahora… sólo hay que saber llevar el ritmo!! como si fuera un baile hasta Navidad
142/365. Tráfico aéreo
Me gusta observar a la gente, cómo hablan entre ellos, que hacen, cómo reaccionan ante las diferentes situaciones, …. y todavía se convierte en algo más interesante observarlo en una terminal de aeropuerto.
La gente suele estar nerviosa, y no todos reaccionan de la mejor manera. Aparecen conductas que desvelan egoísmos ocultos, (o no tan ocultos) o preocupaciones por falta de información o de experiencia en este tipo de situaciones.
Además, te das cuenta de que no existen estereotipos, jóvenes de apariencia despreocupada y que son los únicos que ceden el asiento, o personas de apariencia amable que no paran de pegar empujones por doquier sin pedir disculpas por su falta de cortesía…
Hay que ponerse en situación, en el momento en el que entras en un aeropuerto, comenzando con el puesto de control, dejas de disponer de tu tiempo… pasas a depender de lo que entre los guardias de seguridad, controladores, compañías, etc… quieran hacer contigo y tu tiempo lo que gusten.
Entre esa falta de tiempo, falta de control y de comprensión sobre los retrasos, falta de información, citas retrasadas, falta de respuestas,… nervios, cansancio, incertidumbre… sale lo mejor y lo peor de cada casa…
Todavía sigo sin entender porqué la gente cuando aterriza el avión, antes de que el avión se pare y las luces de seguridad se apaguen, ya se han levantado a por su equipaje de mano y caminen hacia la terminal sin seguir el camino dedicado a los peatones.
¿Será cuestión de dar ejemplo? ¿es sólo cuestión de uno?
Libros de ayer y de hoy…
¿qué “es” el tiempo, de verdad? —Si acabas de descubrirlo tú misma —le contestó el maestro “Hora”. —No —dijo Momo—, quiero decir el tiempo mismo. Tiene que ser una cosa u otra. Existe. ¿Qué es en realidad? —Sería bonito —contestó el maestro “Hora”— que también a esto pudieras contestar tú misma.
Momo reflexionó largo rato.
—Está ahí —dijo, hundida en sus pensamientos—, eso es seguro. Pero no se le puede tocar. Ni retener. ¿Acaso sea algo parecido a un olor? Pero también es algo que siempre pasa. Así que tiene que venir de algún lugar. ¿Acaso es algo así como el viento? O no. Ya lo sé. Quizá sea una especie de música que no se oye porque suena siempre. Aunque creo que ya la he oído alguna vez, muy bajito.